28 oct 2024

28 de Octubre, 2024 Descubriendo los secretos de El Impenetrable: un viaje al corazón del Chaco

En un reciente viaje por la región de El Impenetrable, en el norte de la provincia del Chaco, Ana María Galarza, titular de la página Te muestro Otro Chaco tuvo la oportunidad de descubrir algunos de los secretos mejor guardados de esta zona. Acompañada por Gucho Rojas, un amigo y guía local, visitó la casa de Don Francisco "Pancho" Montes, un antiguo poblador criollo que ha vivido en la zona durante más de 76 años. Es uno de los hombres más conocidos y más respetados por El Impenetrable, incluso las nuevas generaciones lo conocen a través de sus padres o abuelos.
Entrevistada: Ana María Galarza. Propietaria de la página de Instagrama Te muestro Otro Chaco (@temuestro_otrochaco) Don Pancho es un hombre que ha trabajado en varias estancias y ha contribuido significativamente a la apertura de caminos en la zona. Su historia es un testimonio de la resiliencia y el espíritu de los criollos del Chaco. También es un artesano habilidoso que crea hermosas artesanías en palo santo. Durante la visita de Ana, nos cuenta que tuvo la oportunidad de conocer al Tapir de Paraje Pozo del Anta, un animal que ha sido domesticado por una comunidad Wichi local. Aunque algunos lo han presentado como un animal salvaje, en realidad ha sido criado desde muy pequeño y es muy amigable. "Mi experiencia en El Impenetrable me recordó la importancia de respetar las costumbres y tradiciones de los pueblos originarios y de aprender de ellos. También me hizo reflexionar sobre la necesidad de proteger y preservar la naturaleza y la cultura de esta región única", contó Ana a NORTE. "No hay mejor manera de conocer tu provincia que estando y haciendo presencia en el Territorio", reflexiona Ana. "Tal vez antes ya habré andado por estos lugares porque a pesar de la dureza de su clima extremo en altas temperaturas que a veces suele acompañar un viento norte, que sólo están acostumbrados los del lugar, hasta sus más increíbles días de frío bajo cero o de escarchas , siento que ando por estos lugares tan cómoda y segura como si estuviera en mí casa", prosigue contando la fotógrafa, quien de a poco se detiene en la particular historia de Dno Pancho Montés. Don Pancho Montes, nacido en el Paraje Dorrego, vive hoy en el Paraje Santa Teresa a unos 15 kms aproximadamente del Paraje La Armonía; o para ubicarnos mejor, a 15 kms de la entrada del Parque Nacional El Impenetrable. Sus 76 años se ven reflejado en su rostro, surcado profundamente por lo agreste del clima del monte; vive con su esposa Bitalina Soraire una gran mujer. Don Pancho Montes es un hombre que hoy el mismo se describe como un "incansable criollo" que desde muy joven trabajo en varias estancias desde el oficio de cosechero, además de "marucho de las vacas". Puestero, también supo "arriar tropas", trasladar animales desde Castelli o desde Miraflores, acompañado por Arturo Cuellar, Tito Bogado y Marcelino Vizgarra, nombres que él tiene muy presente de esos años de trabajo y que seguramente fueron personas muy significativas. Además contribuyó mucho desde su trabajo para los demás criollos de la zona, por ese entonces junto a otros vecinos a partir del 3 de abril de 1995 Vicente Montes, Carlos Gómez, Jesús Salto, Olga Salto, Don Peñaloza y Tránsito Matorras fueron los primeros "jaladores", los que abrieron caminos machete en mano, entre el tramo Paraje Fortin Arenales y Paraje La Armonía un poco más de 16 kms, por órdenes del Maestro Luis Alberto Vargas, quien insistió en abrir esta parte del camino y como lo recuerda Don Montes "el exigidor", una parte de lo que sería hoy la Ruta del Parque Nacional El Impenetrable. Uno de sus trabajo que tiene muy presente Don Montes, con un afecto muy especial es el de Puestero en la Estancia de Roseo, así la nombra él, Estancia La Fidelidad, casco de la misma que hoy quedó dentro del Parque Nacional El Impenetrable. Trabajó junto a los hermanos Luis y Manuel Roseo durante 24 años, relató Don Pancho. De hecho, guarda hasta el día de hoy, todos sus recibos de sueldo durante esos 24 años hasta el último mes de trabajó, en diciembre de 1985. "En la misma cajita guarda una foto muy importante para él, donde se lo ve con Don Luis Roseo y otros papeles más que le trae recuerdos muy gratos de sus años por La Estancia La Fidelidad", cuenta Ana María. Don Francisco también guarda celosamente una agenda donde anota el nombre y la fecha de quienes lo visitan en el Paraje y suelen también quedarse algunos días a acampar en el patio de su casa. Recuerda con mucha estima a Marcos Villamil el gaucho del Proyecto Abrazarte Argentina, que recorrió 9.000 kilómetros a caballo por todo el país y se quedó unos días a descansar en lo de Don Pancho y a aprender del Impenetrable con él Hoy Don Pancho y luego que dejara de trabajar en La Estancia de Roseo, se sigue dedicando al trabajo de campo pero en el lugar donde vive, el Paraje Santa Teresa, se levanta todos los días a las 6 de la mañana, comparte unos mates con su esposa y comienza su rutina de trabajo. "Compartí con él, con Gucho Rojas mí guía y otros amigos que me acompañaron ese día, durante 2 horas y hasta hoy no salgo de mi asombro y no deja de sorprenderme lo mucho que El Impenetrable tiene para ofrecernos", relata emocionada Ana, quien asegura que "atesora esa otra mirada, este otro Chaco, el que muy poco conocen los chaqueños y casi nada el resto del país o en el mundo; que son su gente, tesoros vivientes que guardan una parte muy significativa de la historia de nuestro Chaco, que también merece ser conocida y contada", sostiene la narradora de esta historia. El Tapir: redescubrir un gran tesoro Otro de los "secretos" que pudo descubrir Ana María fue encontrarse con un Tapir, que hace un tiempo atrás algunos visitantes por El Impenetrable, supieron definirlo cuando lo encontraron como un Tapir silvestre o salvaje, hasta llegaron a mostrarlo como un animal que al parecer tenía mucha sed. La particularidad con este Tapir es que se acercaba mucho a las personas que tenían el privilegio de encontrarlo por la ruta. El encuentro fue entre Paraje Nueva Población y un poco más allá de Paraje Pozo del Anta, a unos 15 kms aproximadamente de Misión Nueva Pompeya. Estando estos días por el territorio me puse a investigar y preguntar sobre este Tapir que se lo vio en varios videos y su imagen se viralizo por todo el país, con las características que mencionaban los autores de las imágenes Según me supieron contar y a ciencia muy cierta porque no hay como los del lugar para que sepan qué pasa por donde ellos nacieron y se criaron "Conocí a un tapir único en el Paraje Pozo del Anta, un lugar especial donde una comunidad Wichi lo crió desde muy chico. De ahí su nombre, "Anta", y el del paraje. Este tapir ha crecido rodeado de personas y ha desarrollado una relación especial con ellas. Regresando de pasar el día en Nueva Población, donde disfruté de deliciosas empanadas de chivo preparadas por las mujeres cocineras del Impenetrable, descubrí este lugar encantador. Les recomiendo visitar El Cámping Los Algarrobos, donde se encuentran, y reservar a través de la Fundación Rewilding en Instagram (@elilpenetrablechaco). Al llegar al Paraje Pozo del Anta, mi amigo Gucho me dijo: "Tal vez tengas suerte y encuentres al Tapir". Y así fue. Lo vi desde lejos, me acerqué y pasé momentos sagrados con él. Como está domesticado, se acerca a las personas sin temor. A diferencia de los animales salvajes, que huyen al mínimo ruido, este tapir es amigable y curioso. Su pelaje brillante refleja su buena salud. Los locales nos recomendaron no alimentarlo ni darle agua, ya que come pasto en su hábitat. Este tapir es un tesoro en el corazón del Impenetrable, un símbolo de la conexión entre humanos y naturaleza", contó Ana, quien no sólo no ocultaba su emoción, sino que fue un redescubrir un nuevo tesoro tan al alcance y a la vista de todos pero tan poco valorado y conocido. Siguiendo con su relato, Ana explicó además que "recomendaron que circulemos con precaución en la zona, no sólo por el Tapir sino también por otros animales que se suelen cruzar en el camino". "Cuando tenemos costumbres, vivencias y culturas muy diferentes, he aprendido que si quiero recorrer El Impenetrable y cualquier lugar de mí provincia, tengo ante todo que respetar el lugar, su gente, sus costumbres y tradiciones", reiteró Ana. "He aprendido mucho en todos estos años de ellos y todavía me falta mucho más por aprender. Sé que lo respetan mucho a este Tapir, lo cuidan. Para los Pueblos Originarios, cualquier animal es sagrado", concluyó la exploradora de momentos únicos. El Impenetrable, una región rica en tesoros naturales, culturales e históricos, ha preservado durante siglos las costumbres y tradiciones de sus habitantes. Sin embargo, la imagen que se tiene de los chaqueños a menudo no refleja con precisión la verdadera identidad. "Creo firmemente que si aprendemos a valorar y mostrar el "otro Chaco", con sus lugares, personas e historias valiosas, podremos destacar lo mejor de nuestra provincia y desarrollar un sentido de pertenencia auténtico. Esto nos permitirá engrandecer nuestro querido Chaco, reconociendo y celebrando nuestras raíces y nuestra verdadera esencia", aseguró Ana tras realizar su última expedición a estas tierras profundo monte, sabiduría y tesoros. Sin dudas hoy nos paramos frente al gran desafío de redescubrir el Chaco y su riqueza cultural y natural. Debemos aprender a mirar más allá de los estereotipos y descubrir los verdaderos tesoros que se esconden en esta región. Al hacerlo, podemos desarrollar un sentido de pertenencia auténtico y trabajar juntos para proteger y preservar nuestro patrimonio cultural y natural. Por Nuri Bendersky Jefa de Redacción Digital https://www.diarionorte.com/281044-descubriendo-los-secretos-de-el-impenetrable-un-viaje-al-corazon-del-chaco

No hay comentarios: